Roma "La Fontana de Trevi"

De obligada visita, la Fontana de Trevi es por excelencia la fuente más grande y más bonita de toda Roma. Su nombre de "Trevi"  deriva de  "Tre  Vie" (tres vías) ya que se trata del punto de encuentro de tres calles.

Con unas dimensiones de 20 m. de ancho por 26 m. de alto, se caracteriza por el contraste entre la monumentalidad de la fuente y la estrechez de la plaza en que se encuentra: tan escondida entre callejuelas que cuesta trabajo encontrarla. Se trata pues, de, una fuente con una plaza.

De fondo, el Palacio Poli con sus gigantescas columnas que enlaza sus dos plantas. En el centro Neptuno bajo un arco del triunfo y su lado la diosa de la Abundancia vertiendo agua de su urna y al otro lado la diosa de la Salubridad sostiene una copa de la que bebe una serpiente. Dos tritones guían la carroza con forma de concha de Neptuno llevados por caballos.

De tiempos del emperador Augusto, cuenta la leyenda qué, una misteriosa doncella indicó al general Agripa el emplazamiento de un manantial de agua a 22 km. de Roma. Entonces el general mandó construir un acueducto, para así traer el agua a la ciudad y en honor a la doncella la llamó Acqua Virgo (el proyecto quedó terminado en el año 19 a. C).

La increíble fuente que hoy admiramos fue construida en el S.XVIII por Nicola Salvi, los trabajos duraron 30 años y acabaron con la salud de Salvi que murió sin ver su obra finalizada. 

Uno de los caballos alados que tiran del carro del dios Océano. El tritón que lo conduce hace sonar la caracola para abrir paso al Señor de las aguas.

Domando las aguas es el tema de este gigantesco proyecto que mezcla agua y roca tallada.

La costumbre de arrojar monedas dice que:

- Si arrojas una moneda, volverás a Roma.

- Si arrojas dos monedas, encontrarás el amor.

- Si arrojas tres monedas, te casarás con tu amor.

Para que esto surta efecto ha de lanzarse las monedas con la mano derecha por encima del hombro izquierdo. Como a nosotros nos gustaría regresar tan sólo arrojamos una moneda cada uno.